
Cepillalo con un cepillo de dientes y después enjuágalo con agua tibia.

Sécalo con secador de pelo o con un paño suave.
SIGUE LOS SIGUIENTES PASOS
PARA MANTENER TUS FRANKA BRILLANTES!

Haz una lavaza con agua caliente y lavaloza o desengrasante.
(Agua caliente, no recién hervida porque se podría quebrar la piedra)

Déjalo reposar un rato.
(Hasta que el agua este más fría)